Tratamiento de la madera muerta de las marcas chinas: Procedimientos de cancelación y reexamen

Los procedimientos de cancelación y reexamen son nuevas herramientas que las marcas pueden utilizar para deshacerse de los registros de marca que bloquean sus propias solicitudes de marca en Estados Unidos. Esta novedad no afecta a las solicitudes de marcas chinas, pero ayudará a las empresas y a la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos (USPTO) a contrarrestar la avalancha de solicitudes de marcas fraudulentas presentadas por partes de China. En términos más generales, ayudará a las marcas, incluidas las que operan en China, a proteger mejor su propiedad intelectual.

En Estados Unidos, los derechos de marca están intrínsecamente ligados al uso de la marca en cuestión. Puede diseñar un logotipo nuevo y atractivo para su marca, pero si no lo utiliza realmente en sus productos o de alguna forma de cara al público, la ley no está interesada en proteger su marca. La primera línea de la Ley de Marcas de EE.UU. (conocida como Ley Lanham) lo deja claro: "El titular de una marca utilizada en el comercio puede solicitar el registro de su marca".

Demostrar el uso de una marca es un requisito previo para su registro (aunque puede presentarse una solicitud antes de que se utilice la marca, sobre la base de la intención de utilizarla). Sin embargo, la USPTO dispone de recursos limitados para confirmar la veracidad de las pruebas de uso presentadas por los solicitantes y vigilar el uso continuado de una marca. Como resultado, el registro de marcas está lleno de "madera muerta", en forma de marcas registradas que no se utilizan en el comercio.

La Ley de Modernización de Marcas (TMA) pretende resolver este problema facultando a la USPTO y a terceros para perseguir las marcas en desuso. Los procedimientos de cancelación y reexamen permiten a terceros solicitar que una marca no utilizada en el comercio sea eliminada del registro. Esto, a su vez, les permite liberar las marcas que desean utilizar.

Los solicitantes de marcas pueden pedir a la USPTO que suspenda su solicitud mientras se resuelve un procedimiento de cancelación o reexamen. Esto resulta muy útil en los casos en que la USPTO rechaza provisionalmente una solicitud debido a un conflicto con una marca similar que induce a confusión. Si esa marca está muerta, el solicitante puede iniciar un procedimiento de cancelación o reexamen y, si tiene éxito, continuar donde lo dejó.

En caso de que se pregunte cuál es la diferencia, en un procedimiento de cancelación, el tercero solicita la anulación de una marca basándose en que nunca se ha utilizado en el comercio. Por el contrario, en un procedimiento de reexamen, la alegación es que la marca no estaba en uso en el momento en que se presentó la solicitud (o, en el caso de una solicitud de intención de uso, en la "fecha pertinente", tal como se define en la TMA).

A veces, las marcas muertas se generan inocentemente. Si una empresa fracasa, sus registros de marca pueden sobrevivir en piloto automático hasta una década. Estas marcas en desuso no son más que un subproducto natural de la destrucción creativa del capitalismo.

Sin embargo, hay una fuente más perniciosa de madera muerta. En un informe de 2021, la USPTO identificó una serie de factores ajenos al mercado que impulsan las solicitudes de marcas "sospechosas" procedentes de China, como las subvenciones y los mandatos gubernamentales concedidos a las empresas chinas para la presentación de solicitudes de propiedad intelectual. Además, los agentes de mala fe, como los ocupantes ilegales y los falsificadores, utilizan el sistema de marcas para promover sus actividades. Los procedimientos de cancelación y reexamen pueden ser la mejor opción para que las marcas hagan frente a los molestos registros derivados de estas actividades.

Para ser justos, China no es la única fuente de madera muerta. Algunos registros problemáticos proceden de otros países, o incluso de los propios Estados Unidos. Los registros defensivos de empresas legítimas también agravan el problema. Estas empresas pueden registrar una marca que no tienen intención de utilizar por si acaso cambian de táctica en el futuro, o para evitar que la registre un agente de mala fe. Dado el fraude incontrolado que existe, estas maniobras defensivas son comprensibles, pero improcedentes desde el punto de vista jurídico.

Los procedimientos de cancelación y reexamen son una novedad, disponible solo desde diciembre de 2021. Nuestro bufete presentó una de las primeras peticiones, logrando que la USPTO suprimiera una marca que bloqueaba el registro de la marca de nuestro cliente. Este caso no tenía nada que ver con China, y la marca suprimida parece ser el resultado inocente de una actividad comercial normal. Sin embargo, nuestro éxito demuestra que los procedimientos de expurgo y reexamen son un arma eficaz contra las marcas muertas, inocentes o no.