Desde que se aprobó la Ley de Regulación e Impuestos de la Marihuana (MRTA) en abril de 2021, Nueva York ha dejado claro que la mitigación del impacto ambiental, incluido el uso de energía, sería un componente clave de la industria del cannabis para adultos de Nueva York. A saber, los legisladores incluyeron expresamente la "capacidad de los solicitantes para mitigar los impactos ambientales adversos, incluyendo pero no limitado al uso del agua, el uso de energía y las emisiones de carbono" como parte de los criterios de selección de la Junta de Control de Cannabis (CCB). Pues bien, la CCB cumplió ese mandato exigiendo a los titulares de licencias que presentaran un Plan Energético y Medioambiental como parte de las solicitudes.
La composición de un Plan Energético y Medioambiental
¿Qué hay que hacer para elaborar un "Plan Energético y Medioambiental"? Muchas cosas. La CCB incluyó 12 requisitos separados y distintos para cada plan, "en la forma y manera requeridas por [la Oficina de Gestión del Cannabis]". Estas son las categorías de información requerida:
- medidas para reducir el uso de plásticos de un solo uso
- acciones para minimizar el uso y la eliminación de productos químicos considerados residuos peligrosos
- medidas que se adoptarán para utilizar compost u otros productos orgánicos reciclados como componentes de los sustratos de cultivo
- áreas para reducir la huella de carbono del solicitante
- la presentación de un informe energético anual que incluya una evaluación comparativa de la energía, tal como exige la Oficina de Gestión del Cannabis (OCM)
- todo el alumbrado previsto y el impacto energético del mismo para cumplir todas las normas establecidas por la OCM
- planes de control medioambiental y mitigación de olores que cumplan todas las normas establecidas por la OCM
- un plan para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la dependencia de los combustibles fósiles
- prácticas de regeneración ecológica
- conservación y uso del agua
- gestión, reciclado y eliminación de residuos
- la estrategia del solicitante para medir, controlar y registrar los resultados y la ejecución del plan energético y medioambiental presentado
Observamos que éstas son sólo las categorías; la versión actual de la normativa establece varias normas de referencia, entre las que se incluyen (pero no se limitan a) normas sobre iluminación, reducción de la huella de carbono y conservación y uso del agua.
Los Planes Energéticos y Medioambientales no son sólo para los titulares de licencias de producción
Una cosa interesante a tener en cuenta es que el requisito del plan energético y medioambiental no se limita a las licencias de producción, aunque algunos de los requisitos se limitan a niveles de cultivo específicos. Dicho esto, para cualquier persona interesada en solicitar una licencia de producción, esperamos que el plan energético y medioambiental sea una consideración importante a la hora de evaluar a los solicitantes y, en consecuencia, tiene sentido leer detenidamente los requisitos.
Tampoco nos sorprendería que las próximas revisiones de la normativa para adultos modificaran los requisitos de los planes energético y medioambiental. Permanezca atento.
