Recientemente se celebraron elecciones en Brasil, en las que Luiz Inácio Lula da Silva fue elegido para un tercer mandato como presidente del país. Para saber qué significan los resultados para el cannabis, nos sentamos con Rafael Arcuri, de la Asociación Nacional de Cáñamo Industrial(ANC) de Brasil. Aunque quedan algunos retos por delante, en general el regreso de Lula al poder es un buen augurio para la reforma del cannabis en la mayor economía de América Latina.
P: ¿Fueron las recientes elecciones significativamente diferentes de las recientes contiendas en Brasil?
R: Esta elección fue diferente en varios puntos. Lula fue el presidente más votado de la historia, con más de 60 millones de votos, pero Jair Bolsonaro también fue el más votado de un candidato derrotado, con más de 58 millones. Fue la victoria más ajustada de la historia. Lula ganó con el 50,9% de los votos y Bolsonaro obtuvo el 49,1%. También fue la primera vez que un presidente en ejercicio perdía la reelección.
Además, Bolsonaro fue el primer presidente que no reconoció su derrota tras las elecciones, tardando más de dos días en pronunciarse sobre los resultados. Esto genera un escenario general de inestabilidad social, pero que debería remitir en las próximas semanas.
P: Además de un nuevo Presidente, Brasil también ha elegido un nuevo Congreso. ¿Cómo puede afectar esto a la reforma del cannabis?
R: La configuración del Congreso es sin duda más importante que la figura aislada del Presidente. Tenemos 513 diputados federales y 81 senadores y ésta podría ser una de las legislaturas más conservadoras en décadas, lo que perjudicaría seriamente los proyectos de ley relacionados con el cannabis.
Sin embargo, hemos visto sucesivas señales de que el Centrão, el grupo de parlamentarios más numeroso del Congreso, puede alinearse con las posiciones del Ejecutivo, dando a Lula una mayor gobernabilidad.
Hemos visto al presidente de União Brasil, Luciano Bivar, decir que su partido no se opondrá "de ninguna manera" al futuro gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva. União Brasil cuenta con 59 diputados electos. El Partido de los Trabajadores(PT) del Presidente Lula eligió a 68 más. El MDB, cuyo apoyo a Lula en la segunda vuelta fue fundamental para su victoria, tiene 42 diputados electos más. Estas son algunas cifras que indican que Lula puede tener más margen de maniobra para gobernar de lo esperado.
Además, devotos partidarios de Bolsonaro ya señalaron su apoyo a Lula poco después del resultado del segundo mandato. El obispo Edir Macedo, uno de los líderes evangélicos más influyentes de Brasil, predicó el "perdón" a Lula y dijo que los fieles no debían lamentar los resultados de las urnas. Los evangélicos tienen cada vez más relevancia en el país, aunque en estas elecciones hayan elegido menos diputados de lo esperado.
Si el gobierno de Lula consigue entablar un diálogo productivo con el Centrão y con al menos una parte de los evangélicos, este apoyo se sumará al de los demás parlamentarios de izquierda y podría significar una mayor facilidad de aprobación de las iniciativas progresistas. Esto será aún más probable si los parlamentarios del agronegocio logran comprender mejor la relevancia económica del cannabis medicinal y del cáñamo industrial.
P: Más allá de las negociaciones que el Presidente Lula pueda hacer en el Congreso, ¿cómo puede influir directamente en la agenda del cannabis en Brasil?
R: El Presidente nombrará a los responsables del Ministerio de Salud, el Ministerio de Agricultura y ANVISA (la FDA de Brasil). Estos organismos tienen autonomía normativa para legalizar diferentes usos del cannabis en Brasil, como el uso animal, los alimentos de cáñamo y los cosméticos. En un país del tamaño de Brasil, esto ya tendría un impacto significativo en el mercado mundial, aunque no se legalizara el cultivo en territorio nacional.
ANVISA, por ejemplo, puede alterar significativamente las regulaciones relativas a los alimentos y cosméticos humanos, permitiendo la importación de alimentos y cosméticos de cáñamo con o sin cannabinoides. Aunque se posponga el debate sobre el cultivo en suelo nacional, el uso humano del cáñamo y el cannabis puede aumentar drásticamente.
Lo mismo ocurre con los cannabinoides de uso animal o los piensos. El Ministerio de Agricultura de Brasil tiene jurisdicción sobre la regulación de esos usos y podría abrir, con relativa rapidez, un gran mercado para los productores extranjeros.
Este es realmente un gran momento para que las empresas internacionales inicien su actividad en Brasil. Como dijo Lula, el amor volverá a Brasil y "en mi gobierno todos saldrán". Este puede ser el comienzo de una historia de amor entre el cannabis y el nuevo Gobierno.
Gracias, Rafael.
En Harris Sliwoski, estamos deseando ver las iniciativas cannábicas que tomarán forma en Brasil en los próximos años. Nuestra oficina de São Paulo está lista para ayudar a las empresas internacionales que buscan entrar en el mercado brasileño.
